Poco o nada sabía sobre la compra de un inmueble, yo era bastante joven cuando decidí realizar la compra de mi primer departamento trabajaba en una entidad financiera que apoyaba a los colaboradores durante el proceso, sin embargo, el encargado no se daba abasto pues tenía por atender muchos expedientes y era una sola persona a cargo. Yo necesitaba el apoyo perenne que me orienten, que me lleven de la mano en la compra del departamento, era muy importante para mí tal vez sería el primero y el único que compraría durante mi vida.
Durante el proceso me sentí sola angustiada, pues la operación debía canalizarse con un producto especial, el producto era ”Préstamo Mi Vivienda” del cual tenía un total desconocimiento, no había información a la mano como hoy en día que coges tu celular y te informas. Solo me quedaba el apoyo o guía del Gestor, en el transcurso del proceso experimenté sentimientos de todo tipo alegría, angustia, zozobra, etc. nadie me explicaba nada, en casa mi padre me dijo que había un bono del Buen pagador que debía averiguar, no sabía si yo calificaba para el bono, en qué momento se aplicaría y si lo podía perder por el tiempo que transcurría. Podía perder no sólo el Bono sino el departamento que había escogido asimismo no tenía información sobre el avance de la calificación, que paso seguía después, yo trabajaba y estaba con la vorágine de trabajo diario el día transcurría en un abrir y cerrar de ojos y se pasaba el día sin consultar el estatus de mi operación.
En casa, mi esposo me reclamaba me decía que sucedía si yo trabajaba ahí, y estaba pasando como dice el dicho “casa de herrero cuchillo de palo”. Por otro lado, tenía la presión de la constructora que presionaba sobre el desembolso y por otro la presión de mi esposo y del trabajo. El estado del país entro en emergencia y recesión, el dólar se disparó y entre en caos. Necesitaba saber cuál era el siguiente paso y no tenía información, no manejaba los términos del contrato ni el vocabulario correcto para saber que documento iba firmar y sus implicancias legales, necesitaba que alguien me explique, me de soporte que todo iba a salir bien después de todo el futuro de mi familia estaba en juego.
Luego de idas y venidas de momentos difíciles por fin se pudo realizar el desembolso y abonar a la constructora, sentí que pasaba cada paso a ciegas. Luego de muchos años transcurridos y de especializarme en cada parte de la cadena de valor del producto hipotecario y sus variedades, he tratado de contribuir con mi experiencia para que el cliente no se sienta solo, por el contrario, se sienta seguro, tranquilo durante el proceso, brindándole un acompañamiento genuino cuidando cada etapa, informándole minuciosamente para que disfrute al lado de su familia de inicio a fin el proceso, ese es mi compromiso.
LISETTE MORALES GARCIA
GERENTE COMERCIAL BE FORCE PERU
